Antepasados.
Miradas perdidas…luces diminutas del infinito,
ramazòn seca de fuego, ramilletes de flores…………..
esos son mis antepasados, que platican en los bosques
en las calles de los pueblos, en sus mercados
en los pasillos de las casas de adobe
en los patios de los ranchos cuando declina el dìa.
Estàn vivos, vibrando en el pentagrama de la marimba,
en la inocencia desnuda de nuestras almas,
sin destrozarse; emergen, como matas de milpa
buscando la luz de su mirada, el fuego eterno,
las flores…….para adornar la casa grande,
en la felicidad de nuestro abrazo.