Verte
El que mis ojos te vieron por primera vez
fuè el milagro increìble de tu esencia
ensueño real de una estrella brillante lejana
como venus en medio de un oceano azul de planetas.
Te percibo con el viento, con las ondas de las aguas cristalinas
donde se cortan las palabras porque el espacio lo ocupa tu sol
iluminando mi ser, sanando heridas viejas de nostalgia
como miel de abejas en un paraje desolado, en silencio…
lleno de la fragancia de Dios…