Tenemos
Y…brilla la luz del nuevo dìa
emerge lenta… con gracia de niña descalza
Se surcan las nubes en cada montaña
con suave murmullo de ave de verde plumaje
Tocan con su blancura grisacèa una parte del cielo
transformandose en exquisita gota de lluvia
aroma de cosecha, olor sagrado de alimento.
Asì lo planificaron nuestros Dioses
Padre y madre de todo lo creado
ponièndo en el regazo de nuestra mano la semilla,
principio de tiempo, misterio y melancolìa.
Siembra nuestro hermano el orìgen, con ternura
en los surcos infinitos de la vida
reproduciendo un sueño eterno, un cambio existente
alegrìa que late en un mundo que agradece y canta
la visiòn perfecta que lo transformò en vida.