Hermana
Ya muy entrada la tarde divisè tu silueta,
caminabas sola con el aroma del bosque
de los ârboles de nuestro cerro; nuestro hogar
tu sonrisa aterciopelada, suave tu mirada
dejaron sin preguntas, tampoco respuestas de presente.
La luz del atardecer nos acompañò por los senderos del Alux
arrancando tù, las càscaras de pino y de ciprès
encendièndo la llama con nuestras hermanas;
el amor, quimera de nuestros profundos deseos
…Te esfumaste… desaparecièndo en la tenue neblina
obscuridad total de noche sin luna
El silencio quedò con nosotras, tu esencia se impregnò
en el viejo encino, que sigue dando sombra y cobijo
…calor de nuestros antepasados.